
En 1914 se mudó con su familia a Suiza y vivió también unos años en España, donde comenzó a publicar en distintas revistas literarias. En 1921, de regreso a Buenos Aires, participó activamente de la vida cultural del momento; junto con Macedonio Fernández fundaron las revistas Prisma y Proa, y firmó el primer manifiesto ultraísta. Además, publicó en Nosotros y colaboró en la revista Martín Fierro. En 1923 publica su primer libro de poemas, Fervor de Buenos Aires, y en 1935 Historia universal de la infamia, una serie de relatos breves. En las siguientes décadas es cuando su fama crece significativamente dentro de Argentina con la publicación de diversos libros de poesía, cuento y ensayo, como lo son Ficciones (1944) y El Aleph (1949); asimismo, publicó obras en colaboración con Adolfo Bioy Casares y Silvina Ocampo, siendo la más destacable Antología de la literatura fantástica (1940).
Publicó distintos libros de poesía como El otro, el mismo (1964), Elogio de la sombra (1969), El oro de los tigres (1972), La rosa profunda (1975), La moneda de hierro (1976), mientras que de narrativa breve escribió los siguientes títulos: El informe de Brodie (1970), El libro de arena (1975) y La memoria de Shakespeare (1983). En las obras La cifra (1981) y Los conjurados (1985) Borges hace una fusión con la prosa y el verso, mezclando el teatro, la poesía y los cuentos. Como traductor realizó versiones de Virginia Woolf, Henri Michaux, William Faulkner y Franz Kafka, entre otros.
Fue presidente de la Sociedad Argentina de Escritores, director de la Biblioteca Nacional, miembro de la Academia Argentina de las Letras, profesor universitario y conferencista en diversos países.
A lo largo de su vida recibió numerosas condecoraciones como la de Caballero de la Orden del Imperio Británico, Comendador de Italia, Legión de Honor francesa y, en España, la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio. También obtuvo el Premio Nacional de Literatura (Argentina, 1956), el Premio Formentor (España, 1961), otorgado por el Congreso Internacional de Editores, y el Premio de Literatura en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes Saavedra” (1979), entre otros más.
En 1973 la Sociedad Alfonsina Internacional le otorgó el Premio Internacional Alfonso Reyes debido a la trascendencia y relevancia universal del conjunto de su obra dentro del campo de las humanidades.